Por Valentina Ocampo Vargas
Colectivo Institución Educativa San Antonio de Prado
La experiencia del día de hoy fue muy bacana, ya que me di cuenta que estamos rodeados de personas muy guerreras. Cuando llegamos al barrio Villa Pallavecini, como a las 9 de la mañana, se encontraba una señora llamada María Isabel haciendo, en un fogón de leña al lado de su casa, morcilla para vender. Esto a todos los chicos y chicas nos pareció muy interesante porque Marcia Isabel es una madre cabeza de familia que por 10 años ha trabajado en esto para sostener a sus hijos.
Del recorrido también me impacto saber que Villa Pallavecini era una finca, pero con el correr del tiempo se fue construyendo bloques de edificios, hasta convertirse en lo que hoy es, un barrio donde vive gente de muchos lados del país, con culturas distintas, algunos escuchan música llanera, otros andan con sombreros y uno que otro muchacho canta a todo pulmón y baila a fuera de su casa, todos viven allí en Villa Pallevecini.
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