Tatuajes en nuestro territorio

Por: Jessica Mejía y David Corrales


 

Juan David es un  chico que práctica break dance en la Casa de la Cultura de San Antonio de Prado,  él nos contó que algo muy común en su vida es tatuarse cada vez  que progresa o se siente deprimido. Es algo que él practica en su cuerpo  para recordar los hechos importantes de su vida.  En su cuerpo un tigre representa la fuerza y la agilidad por lo que práctica el break  dance. 



Luz Adriana se hizo su primer tatuaje a los 12 años de edad y está totalmente arrepentida. Ella dice, que esto no se ve bien en nuestro cuerpo, además cree que no es un buen ejemplo para que sus dos hijas aprendan.

 
Jair es un personaje bastante reconocido en nuestro corregimiento porque tiene un local de tatuajes llamado Wanadoon. Él nos contó que el tatuaje es un adorno corporal, y que los más comunes en nuestro corregimiento son los tribales.“Las personas cuando tatúan su cuerpo es porque representa  
algo en sus vidas”.

Él nos mostró sus tatuajes y nos contó que tiene el rostro de su hermano menor, unas hadas que cree en ellas por los sueños, el escudo del Medellín porque es hincha. Finalmente nos aconseja que cuando vamos hacernos tatuar debe de ser en un lugar que tenga todas las medidas de seguridad y aseo.

El graffiti: arte, libre pensamiento

Por: Ana María Mejía, Bryan Herrera y Juan Pablo Echavarria

Esto fue una experiencia en la que aprendimos del arte callejero, de lo que verdaderamente es algo muy bonito pero, en ocasiones, rechazado por la gente. En esta ocasión, este trabajo fotográfico fue realizado en varios lugares de nuestro corregimiento, con la intención de mostrar el detalle del graffiti. 


Este graffiti está en la cancha del Manuel J. Betancur. Lo que llama la atención de este grafiti es el símbolo de interrogación en la frente de este muñeco


Algunas firmas de grafiteros que hay en todo el corregimiento. Por ejemplo la del lado derecho es una pulguita y su creador es un joven llamado Jonathan del barrio El Vergel

Se encuentra en el puente del Chispero

Logra ubicar en un mismo lugar a personajes imaginarios y cotidianos

Un grafiti ubicado en la cancha de arena


Ahora escuchen nuestra opinión sobre el graffiti:
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Personajes curiosos de nuestro corregimiento


Por Juan Pablo Gómez y Juan Pablo Echavarría




 Andamos averiguando por esos personajes que llaman la atención en nuestro corregimiento y en una salida en su búsqueda nos encontramos con un hombre que siempre viste una ruana de cuadros, es muy callado, misterioso y su rostro está quemado por el sol. 
Cuando fuimos a entrevístalo estaba dormido,  esperamos un tiempo largo hasta que se despertará y pudimos hablar con él. No pudimos saber muchos de él porque casi no habla, sólo nos dijo que su nombre es “Antonio”;  después fuimos a investigar un poco más con los vecinos y nos encontramos con Carlos, él nos contó que el señor, según él, se llama “Jesús”. Al final, no supimos con certeza cómo se llama el señor, si es Jesús, Antonio o Jesús Antonio.

Pero continuamos preguntando por su historia hasta que una señora nos contó que él vivía por Cootrasana pero que se venía todos los días para los bajos del puente  del chispero, porque le molestaba el ruido de los carros y la música. 

La voz de las hermanas Vásquez suena en el olvido


Quizás pocos conocen que en el barrio Paloblanco se guarda la historia de las hermanas Vásquez, quienes fueran dos cantantes de la música popular reconocidas en la ciudad. En su casa se guarda sus discos, sus fotografías y los relatos de sus vidas como artistas. Los reporteros del Sistema de Comunicaciones las recuerdan en esta nota.

Por: Camila Montoya y Nayive Valoyes

Hace ya 35 años las hermanas Vásquez salieron a relucir su pasión y habilidad para interpretar música carrilera. Con sus cantos llegaron a cada rincón del corregimiento e incluso a bares y cantinas de Medellín. Dieron a conocer su cantar popular y tocaron corazones con cada melodía que brotó de lo más íntimo de sus seres, haciéndose grandes en el mundo parrandero de la época.

Sin embargo, y a pesar de la fama que lograron alcanzar, la familia no siguió las huellas que dejaron las Vásquez con su melódico cantar y escogieron transitar otros caminos dejando perder aquella vena artística con el tiempo, silenciando para siempre la voz y el legado de dos grandes artistas  enterradas en el olvido.

 Hoy sus  voces solo son el ruido del silencio.

La foto que no se dejó fotografiar

Por: Camila Montoya y Nayive Valoyes

José Luis Reales y Alejandra Castro la vieron. Era una fotografía sepia de una joven de 16 años que apoyada en una mesita y un vestido que parecía blanco con pepitas los miraba sin ver. Era Juliana, la madre de Angelina, que en su vejez vive en una de las casas más antiguas de Paloblanco. Tan antigua es que conserva el sótano y la cocina de leña donde su madre acostumbraba a cascar la mazamorra y el café. 
Deseosos de obtener una copia de este retrato antiguo, decidieron capturar con sus modernas cámaras digitales la imagen susodicha. Se acercaron. Tomaron la foto, pero no salió. Se veía oscuro. No se veía nada. Abrieron el escaparate, porque creyeron que era a causa del vidrio. Tomaron la foto. De nuevo no salió nada. Salía el marco de la fotografía pero Juliana, con su mirada infinita, se negaba a colaborar con este trabajo. 
José y Alejandra asombrados desistieron de su intento por tener una copia de Juliana. Tristes y acongojados, comprendieron que Juliana no permitió de nuevo ser capturada. Simplemente quería ser observada y habitar solo en su eterno hogar.

Nuestra experiencia con Un día de la vida de Diego

En la vereda Astillero vive nuestro amigo y compañero de escuela Diego, nosotros decidimos contar un día en su vida y así fue nuestra experiencia.

Cuentos de Naranjitos

Naranjitos es uno de los barrios más tradicionales de nuestro corregimiento San Antonio de Prado, así que decidimos investigarlos y encontramos datos sobre su fundación, una historia de amor, relatos de personajes e historias sobre encantos. Entonces hicimos Cuentos de Naranjitos.

En las calles

Los niños de Yarumalito